La glicerina para la piel de los niños
No hay duda que los mejores productos para la higiene de los niños y bebés son los más naturales que contienen ingredientes orgánicos y en los cuales no encontramos productos químicos sintéticos, como es la glicerina. Tenemos que tener en cuenta que la piel es el órgano más grande que tenemos, es el que está más expuesto al exterior y todo el que recibe por cremas y jabones lo absorbe y pasa al torrente sanguíneo. Por lo tanto, tenemos que vigilar que los productos cosméticos de nuestros hijos (y también nuestros) no contengan derivados del petróleo ni otras sustancias químicas agresivas, por ese motivo lo esencial es usar productos de glicerina. Es decir, no sólo no nos tenemos que dejar llevar por los reclamos publicitarios y por los productos que se comercializan destinados al público infantil, sino que tenemos que tener un buen criterio a la hora de elegirlos, aparte de procurar optar por cosméticos con certificación orgánica.
A continuación encontraréis cuatro pasos sencillos para escoger con criterio y sentido común:
Primer paso: simplificáis. Usáis menos productos. Recordáis que la piel de los niños es muy sensible, el jabon de glicerina tiene que estar ahí.
Pañales, toallitas húmedas, hielo de baño, champú, lociones, espumas, cremas para el pañal. Es importante minimizar el potencial de exposición a sustancias químicas eliminando los productos que no son necesarios y optar por soluciones con ingredientes naturales. Por ejemplo: para limpiar el culito del bebé, podéis utilizar agua tibia y una toalla, o hacerlas a casa como propone este vídeo; usáis, también, un jabón neutro tanto para el cuerpo como para los cabellos, y evitáis los jabones con mucha espuma, utilizando de glicerina.
Segundo paso: menos es mes. Usáis productos con menos ingredientes y sin fragancias, la glicerina es clave en este paso.
Leéis la etiqueta del producto (INCI). Cuanto más sencilla sea la composición, más se acercará a un producto natural. Evitáis los ingredientes como el sodium laureth sulfate y el sodium lauryl sulfate, los derivados del petróleo o el triclosan. Y elegís productos que al INCI aparezca: water, oil y extract como ingredientes principales (a primeros de la lista). A veces, dar un vistazo rápido a la longitud de la lista de ingredientes nos puede proporcionar una información muy valiosa. Si es muy larga, desconfiad, y analizadla bueno. También es importante decantarse por productos libres de colorantes y pigmentos sintéticos y fragancias sintéticas. Dentro del término “fragancia” se incluyen más de 3.000 ingredientes. Podemos encontrar desde un aceite esencial –en el caso de la cosmética ecológica y natural− hasta ingredientes sospechosos de ser cancerígenos, como el ftalat o toluè, que se utilizan como disolventes.
Tercer paso: no hacéis caso de los anuncios publicitarios. Comprobáis siempre la etiqueta que idique el porcentaje de Glicerina.
